Malditos días que son ruinas,
días con olor a escombros y olvido,
días de los que hasta el sol huye.
Malditos días de lluvia negra
con olor a moho y ausencia,
noches sin estrellas que calienten unas manos frías,
manos muertas de añoranza y desamor.
Días, noches, manos con el sabor amargo de la soledad.
Malditos días sin ti.